Un hombre de 51 años fue condenado hoy a ocho años y medio de prisión tras ser hallado culpable del abuso sexual de su hija menor de edad en la ciudad santafesina de Firmat y la Fiscalía anunció que apelará la condena por considerarla insuficiente, informaron voceros judiciales.
Se trata de un hombre identificado con las iniciales M.J.P.A, a quien un tribunal de la ciudad de Melincué, integrado por los jueces Paula Borrello, Lorena Garini y Benjamín Révori, condenó por unanimidad por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo en perjuicio de su hija menor de edad.
El imputado fue absuelto por la autoría de abuso sexual simple agravado por el vínculo en perjuicio de su otra hija, también menor de edad.
La fiscal Susana Pepino, del Ministerio Público de la Acusación, indicó que la calificación penal que le atribuyó al acusado «era otra» y que había solicitado una pena de 16 años de prisión.
«También acusamos al condenado por otro hecho ilícito en perjuicio de su otra hija”, advirtió Pepino, quien adelantó que analizará en detalle los fundamentos del fallo y apelará lo resuelto en primera instancia.
La fiscal dijo que «en el juicio quedó probado que el condenado abusó sexualmente de la niña en las primeras horas del domingo 22 de agosto de 2021”, y que «el ilícito fue cometido en la casa a la que se había mudado el hombre, luego de divorciarse de su esposa y madre de las dos niñas que tienen en común”.
La investigación se inició de oficio por el MPA a raíz de una denuncia anónima que llegó en un sobre un mes después al Centro Territorial de Denuncias de Firmat.
“En el interior del sobre había una hoja escrita en computadora en la que se brindaban detalles de lo sufrido por la niña, los cuales fueron ratificados por la madre de la víctima”, precisó la fiscal.
Pepino añadió que el escrito indicaba que el denunciante esperaba que «hacer esta denuncia anónima sea el comienzo para proteger y garantizar los derechos y acompañamientos necesarios, que sin lugar a dudas, hoy está necesitando la nena”.
El MPA aclaró que la identidad del hombre condenado se preserva para evitar la revictimización de sus hijas, quienes tienen el mismo apellido.